Este proyecto responde al encargo de diseñar el “hogar” de una nueva cadena de restaurantes-mercado (tipo feria), en una casa existente.

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La intervención respeta los materiales nobles con que esta casa fue constituído en los años 60 en un barrio de la comuna de Vitacura (Santiago), sacando a relucir la piedra, la madera y los jardines típicos de la época.

Sin intervenir la estructura de la casa, y dejando parte de ésta a la vista, se elimina la tabiquería y cielos falsos conectando el primero con el segundo piso por medio de un balcón. Así, tanto en su alto como en su ancho, se aprovechan las bondadosas dimensiones totales de la casa.

Siempre ubicando el proyecto entre la practicidad de un restaurant, y lo cálida de una casa, se replantea un antiguo apéndice producto de una remodelación anterior, en un invernadero donde crecen los mismos ingredientes que componen el menú del restaurant.

Parte de la estrategia comercial considera eliminar todos los muros hacia las calles para regalar al barrio una nueva plaza- esquina, y a la vez ganar exposición.